Por Calistina


Corría el año 1972 cuando vino al mundo Juan Díaz Canales. Aficionado a los cómics desde su más tierna infancia, sus ganas de aprender sobre todo lo que concernía a su afición, desde el dibujo hasta la animación, le llevó a estudiar en una escuela de animación a los 18 años. Fundó la compañía Tridente Animación con otros tres artistas en 1996, lo que le permitió expandirse por Europa y América, haciendo guiones tanto de series como de películas.

Junto a Juanjo Guarnido presenta un proyecto de cómic a la editorial francesa Dargaud en el 2000: Algún lugar entre las sombras (1er tomo de Blacksad) al que siguieron Artic Nation , Alma Roja y el último tomo (de momento)El infierno, el silencio.


Paralelamente a Blacksad, publica Los Patricios con el ilustrador Gabor y actualmente con Munuera, el cómic Fraternity.

Conozcamos mejor al premiado guionista con sus propias palabras:


Koukyou Zen: Desde muy temprana edad te interesaron los cómics y llegaste a abarcar películas de animación. ¿Qué era lo que más te motivaba, el dibujo o la trama?


Juan Díaz Canales: Pues ambas cosas. Es decir, lo que me ha resultado fascinante desde chico es el poder contar historias con imágenes. Los dibujos animados son un medio fantástico para ello, pero el cómic es mucho más asequible, ya que para hacerlos hace falta poco más que un lápiz y un papel. Y saber dibujar un poquito y tener una historia que contar, claro...



KZ: ¿Tan mal está el panorama del cómic español para tener que emigrar a Francia?

J.D.: Es cierto que es complicado vivir exclusivamente del cómic en España. Eso obliga a que el autor español se diversifique trabajando para más campos como la animación, la publicidad, ilustración, prensa, etc, o que se busque la vida en el extranjero. Afortunadamente vivimos una edad dorada de las comunicaciones y no es tan complicado trabajar para el exterior. Gracias a Internet hoy en día resulta muy fácil colaborar a distancia.

KZ: Has recibido muchos premios, casi todos en el país galo. ¿Cuál te hizo más ilusión? ¿Por qué?


J.D.: Todos hacen ilusión, pues son la expresión de un reconocimiento al trabajo. Quizás el que más orgullo me ha procurado es que dieron a Blacksad como mejor serie en Angoulème. Es tantísima y tan buena la competencia que existe en el mercado franco-belga, que el hecho de ser destacado entre tanta calidad es un honor.
KZ: Por publicaciones conocemos que te dedicas al cómic de manera secundaria ¿cómo se pueden superar las trabas personales -falta de tiempo, imposibilidad de comunicación con el compañero, vida familiar, etc.- para poder concluir el comic?


J.D.: De entrada, escribir un guión es laborioso, pero no tanto como dibujar un álbum. Por lo que se refiere a la falta de tiempo, bueno, precisamente hasta ahora no ha sido mi profesión principal porque siempre he tenido la inmensa fortuna de poder afrontarlo como una pasión. Y cuando uno hace algo con pasión, saca el tiempo de dónde sea. También cuento con el apoyo incondicional de mi mujer Teresa Valero, que también es guionista y dibujante y comprende perfectamente el día a día del trabajo de autor.

KZ: Uno de tus libros más elogiado, es “El corazón de las tinieblas” de Joseph Conrad y que sirvió de guión a la laureada película “Apocalypse Now” ¿podríamos decir que te ha influido en algún guión, como en “Fraternity” donde tocas temas como la desintegración de una comunidad utópica?


J.D.: Las influencias son difíciles de rastrear. Por seguir el ejemplo de Fraternity, el cómic que estoy haciendo junto a Jose Luis Munuera, está bastante inspirado en una experiencia comunitaria real llevada adelante a mediados del siglo XIX por el industrial y filósofo escocés Robert Owen en el pueblo de "New Harmony", en Indiana. Pero también están presente en la trama elementos de la película de Truffaut "El pequeño salvaje" que cuenta la historia de un muchacho salvaje recogido en un bosque o de la película "Tiempos de Gloria", que habla sobre uno de los primeros regimientos del ejército de la Unión formados por negros durante la guerra de secesión en los EE.UU.


KZ: ¿Qué te resulta más difícil a la hora de crear el guión? ¿El comienzo, el final o el hilo que debe unir esos dos puntos?


J.D.: Lo más difícil para mí es imaginar una historia y unos personajes que me parezcan interesantes. Es algo anterior al proceso de escritura final. Es decir, cerrar una trama puede ser más o menos complicado, pero hay una serie de recursos técnicos, de oficio, que pueden ayudarte mucho. Pero dar con una idea, un personaje o un concepto interesante, eso es más complicado y no sueles tener más muletas que la de la inspiración.

KZ: En “Los patricios” cambias totalmente de registro y pasas de los tópicos de serie negra de “Blacksad” al humor cotidiano que recuerda a los cómics de “Superlópez”. ¿Qué cuesta más elaborar, historias policíacas o viñetas humorísticas?


J.D.: Siguiendo el razonamiento anterior, a la hora de dar con la idea buena puede resultar igual de difícil. Diría incluso que en el caso de una historieta como "Los Patricios" puede ser más complicado ya que el humor depende mucho más del ingenio que de la técnica. En cuestión de cantidad de trabajo, las tramas policíacas como las de Blacksad, resultan más laboriosas porque suelen manejar muchos personajes, con relaciones complejas y multitud de sucesos enrevesados a los que cuesta dar una coherencia narrativa.

KZ. He leído publicaciones donde se menciona que el proyecto de Blacksad estuvo parado durante 4 años ¿qué os motivó a retomarlo?

J.D.: En realidad, jamás nos planteamos pararlo. Simplemente han sido unos años en los que hemos tenido infinidad de circunstancias que nos han impedido retomar la serie durante un periodo de tiempo demasiado largo. Algunos motivos personales pero sobre todo, laborales, pues al mismo tiempo hemos estado implicados en otros proyectos. Juanjo Guarnido ha hecho dos álbumes de la serie "Brujeando" y todas las portadas de "Viajero" y yo he continuado realizando storyboards para animación y los guiones de "Los Patricios" y "Fraternity"


KZ: El nivel gráfico de “Blacksad” es muy alto y llama la atención el uso de animales antropomórficos y especialmente el hecho que el detective sea un gato y no un perro por aquello de los sabuesos. ¿A quién y cómo se le ocurrió la idea?


J.D.: El "casting animal" viene determinado siempre por mí en el guión, aunque siempre sujeto al sabio comentario y pertinente variación de Guarnido. En el caso concreto de Blacksad elegí el gato porque me parecía que era la perfecta encarnación de la elegancia y la independencia, ambas características perfectas para un detective privado.


KZ: Entre Juanjo Guarnido (dibujante de Blacksad), Gabor (artista de Los patricios) y José Luis Munuera (el artífice de El juego de la luna) ¿quién te exige más en cuanto al guión? ¿ con quién trabajas más a gusto?


J.D.: Sus caracteres son tan diferentes entre sí, que obviamente la colaboración con cada uno de ellos es completamente distinta. Eso sí, hay un factor común y es que hay una gran relación de amistad con ellos previa a la relación profesional. Eso hace que los problemas sean nimios y que la experiencia de colaboración con todos


KZ: ¿Eres amante de películas como “El Halcón Maltes” o de personajes como “Sam Spade”?


J.D.: Sin ser un grandísimo aficionado a la serie negra, siempre me han gustado los clásicos del género tanto en su versión literaria como cinematográfica.

KZ: ¿Qué volumen de Blacksad recuerda con más cariño? Mójate y escoge uno.


J.D.: Es fácil. Siempre es el último, en este caso "El infierno, el silencio"

KZ: Nuestra revista tiene una sección dedicada al comic de autores noveles, tanto guionistas como dibujantes, que publican sus obras en internet, ¿qué consejo les darías?


J.D.: Parafraseando al gran maestro JM.Bèa, un par de consejos que suscribo al cien por cien: 

1-"Mucho arte, cine, pintura, música, literatura, etc. Cuanta más cultura poseas, adquirida en libros y en la vida misma, más tendrás ganado en tu favor. Un buen autor de cómic no sólo lo es por sus dibujos." 

2-"No contabilices los días, meses ni años que llevas empleados en conseguir ser profesional. Un día ocurre. Pero si a pesar de todos tus esfuerzos sufres mucho, no avanzas y esta profesión no te da ninguna satisfacción, olvídala. Existen cosas más importantes en esta vida que dedicarse a dibujar cómics"